Jorge Etcheverry
Cronometría
las horas en la mañana se estiran
como zarcillos lánguidos a eso de las doce
se comienzan a secar no importa cómo
tratemos de que sigan húmedos
de hacer esas horas un
poco más fructíferas, para que sigan corriendo
llenas de contenido datos e ideas como niñas que corren corren
en sus faldas en el pelo llevan lo ya mencionado
miríadas de hojas multicolores
otoñales
Es inútil
el cuerpo pide la siesta
después las horas se van acortando recorren
con frió las calles heladas de
las neuronas y
desaparecen en la noche pero ojo
el reloj geocéntrico marca la hora
del despertar de la otra niña
la luna que va a poblar
de minutos preñados las praderas
las ciudades del sueño
Cronometría II
El reloj de la noche convoca las mareas
que suben o retroceden según la latitud la longitud
el sueño fisiológico se dilata detrás de los párpados
los ritmos circadianos orientan sueños y actitudes corporales remanentes
de nuestra existencia de amebas orientadas por la luna o
el sol
Hacia el final de la noche
se aglomeran en unos segundos los sueños en que a veces
se visitan los mismos lugares, se encuentran las mismas personas
o es toda una vida la que se despliega desde la más tierna infancia
a lo mejor uno es ese otro que se sorprende dice en sueños
éste no soy yo este no es mi cuerpo antes de despertar olvidar
en unos segundos esas vidas hay una persona que conozco
me dice mira Jorge estoy armando en sueños un mundo paralelo al
que voy a veces agrego cosas hay barrios que evito tengo
amigos a quienes veo a veces todavía me pierdo con el
nombre de las calles las direcciones la plata que llevo de acá
no sirve entonces recurro a mis amigos allá busco un trabajo
antes de despertarme aquí en este tiempo solar que se alarga
regular y me baño me visto me peino reconozco la ciudad
salgo
No comments:
Post a Comment